Dos poemas
Alejandro Aurelio Rivera Álvarez
Conclusión de ti
¿Por qué te quiero?
Porque concluyo que todo es unión.
Así que no me queda otra que amarte,
así que no me queda más que no amarte.
Solamente porque estás tú.
Y yo no estoy ahí.
Que te quiero igual;
que me quieres, pero no igual.
Que me quedan muchos caminos;
que uno de esos es irme.
Dejarme, dejarte, sin que nos dejemos
porque igual seguirás lejana y tuya.
Nunca mía, nunca jamás.
Y aunque el olvido no exista, el que olvida aprende.
Mundo
Qué lejano el mundo de ayer,
en su laberinto de travesías,
cuyos caminos sin ver recorrí.
Más de la mitad de mi vida
la pasé buscando alejar.
Cuánto me falta el otro ayer,
ese de voces conocidas,
el de las ganas sin hambre,
Cuando andar era motivo.
¿Qué fue de mis sueños?
¿Qué fue de mi vida?
Qué lejano el mundo de hoy,
que a la noche, el rumor de casa
llega en lluvia de otras nubes
por mojar mi cuerpo casi llano,
cansado en su fastidio,
con destino en parte del olvido.
Qué lejano el mundo de mañana,
lleno de todo y nada y nadie,
pero igual al de hoy;
tan lejos sigue aquí.